Andrés Calamaro vuelve a tener problemas con la justicia argentina a causa de la marihuana. Tras la denuncia del legislador Aurelio García Elorrio, la fiscal Graciela López de Filoñuk de la ciudad de Córdoba ha abierto una causa contra el rockero por incitar al público a consumir marihuana en el festival Cosquín Rock 2015. De seguir adelante el proceso, Calamaro podría enfrentarse a una pena de hasta seis años de cárcel.
En la denuncia se dice que “Según cuentan registros periodísticos, entre los temas ‘Tuyo siempre’ y ‘Loco’, habría gritado la frase ‘qué linda noche para…’ a lo que la audiencia debía responder de acuerdo a los antecedentes y costumbres del músico ‘fumarse un porrito’, lo que sucedió en forma masiva entre aplausos y algazara, a lo que el músico replicó: ‘Si vamos imputados, vamos imputados todos’, provocando nuevamente las risas y algazara del público juvenil que idolatra al músico”.
En 1994 Calamaro fue acusado de “apología del delito” por gritar “Es una linda noche para fumarse un porrito”, en un concierto cierto en La Plata. Luego, en 2009, se le instruyó una causa por fumarse un cigarrillo de marihuana ante el público.
