“Bullitt. Un policía llamado Steve McQueen”, de Luis Aragón e Iván Gómez

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“La mítica persecución tiene su protagonismo. Lo contrario hubiese sido como ir a ver a Lynrd Skynyrd y que se marcharan al hotel sin tocar ‘Sweet Home Alabama’”

 

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“Bullitt. Un policía llamado Steve McQueen. Historia, análisis, mito”
Luis Aragón e Iván Gómez.
EDITORIAL LAERTES

 

Texto: FERNANDO BALLESTEROS.

 

Si vas a leer “Bullitt. Un policía llamado Steve McQueen. Historia, análisis, mito”, cosa que de entrada recomiendo, es aconsejable que acudas a la película antes de comenzar y lo vuelvas a hacer al acabar el libro. De esta forma vas a apreciar mejor todo lo que te ha aportado este concienzudo trabajo de Luis Aragón e Iván Gómez.

En el libro escrito a cuatro manos, ambos se proponían meternos de lleno en una película, “Bullitt” (Peter Yates, 1968), en la que Steve McQueen interpretaba a un teniente de policía de San Francisco, a cuya esposa daba vida la maravillosa Jacqueline Bisset. La obra consigue su objetivo, porque el trabajo es exhaustivo y por supuesto no se limita al análisis y la gestación de la cinta. Para el que tiene una relación con el cine de aficionado raso es más que gratificante el énfasis con el que sitúan el contexto histórico, el momento que vivía Hollywood o el papel que terminó jugando en la evolución del género policiaco. Además, es un trabajo documentado: por sus páginas desfilan los testimonios del guionista Alan Trustman, del productor Phil D’Antoni o del compositor Lalo Schrifrin, aportando luz sobtre detalles hasta ahora no conocidos o casi olvidados por el paso de los años.

Los entresijos del montaje, distinguido con el Oscar y el análisis más puramente técnico, los recursos expresivos y narrarivos, ocupan buena parte de estas casi cuatrocientas páginas, pero no negaré que un servidor –aficionado raso, recuerden– ha disfrutado más las referencias sociológicas, el análisis de San Francisco como un personaje más del filme y la buena ración de anécdotas y curiosidades que nos podemos llevar a la boca, por ejemplo sobre el reparto en el que en su papel de productor McQueen iba a tener voz, voto y capacidad para imponer algún que otro nombre.

Y, por supuesto, la mítica persecución tiene su protagonismo. Lo contrario, hubiese sido como ir a ver a Lynrd Skynyrd y que se marcharan al hotel sin tocar ‘Sweet Home Alabama’. Por eso, aquí se habla con detalle de aquellos diez minutos que pasaron a la historia del cine. Por cierto, como suele ocurrir, casi todos tratan de atribuirse el mérito del éxito de la persecución: el director, el guionista, el propio McQueen… pasen, lean y comprueben. Además, los autores acaban con más de un mito más o menos extendido, como ese que dice que el actor protagonista condujo durante toda la persecución. Por algo decía que aquí hay muchas horas de trabajo metidas, ya que para que no haya dudas, aparecen hasta los nombres de los especialistas que hicieron el trabajo de aquellos diez minutos que consumieron entre dos y tres semanas de rodaje.

La forma de encarar el papel de Steve McQueen, el recibimiento que tuvo “Bullitt” entre los críticos, hasta el paradero del Mustang de la mítica escena y algunas de las peripecias que le han rodeado estos años tienen su espacio en este libro, recomendable para todo aficionado al cine y a cualquier forma de cultura popular y un festín para un buen cinéfilo.

Anterior crítica de libros: “Crónicas. Volumen I”, de Bob Dylan.

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