Franco Battiato es objeto de una gran polémica en Italia por el discurso que pronunció ayer en el Parlamento Europeo, en el que llamó putas a las parlamentarias italianas: “Las putas están en el Parlamento dispuestas a hacer cualquier cosa, se debería abrir un casino”.
Las críticas le llovieron por todas partes. La nueva presidenta del Parlamento italiano, Laura Boldrini, dijo, “Me cuesta creer que un hombre de la cultura de Franco Battiato haya podido pronunciar palabras tan vulgares. Como Presidenta de la Cámara de Diputados y mujer rechazo enérgicamente un insulto que atenta contra la dignidad del Parlamento”. Críticas similares fueron realizadas por representantes de todos los partidos.
Por su parte, Rosario Crocetta, presidente de la Junta Regional de Sicilia, se ha apresurado a destituir a Battiato de su cargo de asesor de cultura. “Cuando se está en las instituciones se respetan y se respeta la dignidad misma de las instituciones, y en el caso de Battiato, sin duda, se ha ido más allá y se ha violado el principio de la sacralidad de las mismas”.
“Me disgusta que mis palabras hayan sido tergiversadas e interpretadas como una ofensa al parlamento actual, al cual tengo estima, o a las mujeres. Solo hablé de una inmoralidad política, no me refería a las mujeres. Nunca he sido sexista y quien me conoce lo sabe”, ha puntualizado Battiato.
