Un juez de Londres aprobó ayer la petición de divorcio presentada por Blake Fielder-Civil contra Amy Amy Winehouse por infidelidad. Winehouse aceptó las alegaciones de infidelidad, a pesar de que en enero, cuando Fielder-Civil presentó la demanda, se había negado. Ninguno de los dos asistió a la vista.
Ahora se inicia la lucha por el dinero, Fielder-Civil reclama la mitad de la fortuna de Winehouse, unos doce millones de Euros. Pero, a pesar de que los jueces británicos suelen dividir los bienes matrimoniales al cincuenta por ciento, los expertos creen que Fielder-Civil no logrará su objetivo al haber pasado por la cárcel.
