Foto: El monumento dedicado a Mafalda en el barrio de San Telmo.
«La ciudad andaba excitada con la inminente llegada de Metallica, banda que ocupaba la portada de la ‘Rolling Stone’ y que tras la cancelación de su gira en 2003 es esperada como agua de mayo»
J. F. León se fue unos días a Buenos Aires con la intención de cambiar frío europeo por calor austral y nos cuenta sus impresiones musicales y andanzas en los días que estuvo en la ciudad.
Texto y foto: J.F. LEÓN.
Me encanta Buenos Aires, es la tercera vez que me he acercado a la capital porteña y no será la última, seguro. Pero en lo posible evitaré volver a viajar en verano, porque esa combinación de calor –más de treinta grados– y humedad es letal. Enero en Argentina es como agosto en España y, como le pasa a Madrid, las calles de la ciudad se liberan de la congestión durante unas semanas, aunque la crisis todavía colea y es mucho menor el porcentaje de bonaerenses que se puede permitir unas vacaciones en condiciones.
La ciudad andaba excitada con la inminente llegada de Metallica, banda que ocupaba la portada de la «Rolling Stone» y que tras la cancelación de su gira en 2003 es esperada como agua de mayo. En la revista se palpaba también la conmoción musical que había provocado la reciente visita de AC/DC –que llenaron el estadio de River ¡tres noches consecutivas!– y también el concierto de Spinetta: “Lección de historia. Fue un concierto épico, memorable, irrepetible. Uno no quiere acumular adjetivos, pero ¿cómo no hacerlo ante un concierto en el que Luis Alberto Spinetta revisó cuarenta años de carrera, reunió por primera vez a dos de las bandas más legendarias del rock nacional –Pescado Rabioso e Invisible– y por segunda –luego de ‘tan sólo’ treinta años–, al big bang originario, Almendra, e interpretó 51 temas a lo largo de 5 horas y media?” rezaba el primer párrafo de la extensa y entusiasta reseña de Claudio Kleiman.
También Sabina es muy querido y le esperaban con los brazos abiertos. Ya estaba en la capital esperando a que llegaran Pereza para arrancar unos conciertos que prometían agotar todo el papel. Pero los principales beneficiados serán Rubén y Leiva, que van a acceder a un publico multitudinario y ojalá suponga su puerta al éxito. Por ahora sus discos están a la venta en los Musimundo y me comentaba Gustavo –del sello Ultra Pop– que acudieron más de cien fans a un encuentro organizado con la banda madrileña en su coqueto y céntrico Ultra Bar, San Martín 678. Precisamente en ese mismo «boliche» van a comenzar una serie de conciertos Nube 9 con un repertorio de versiones de los 60. Su faceta más beatle la guardan para The Cavern –en el paseo de la Plaza, en Corrientes 1660– y Ramos Mejía. Ahora estaban enfrascados en una intensa gira con conciertos en la costa, en Mar de Plata y Pinamar, y ha sido una pena no haber podido asistir ni a uno de sus siempre excitantes shows. La verdad es que están en un momento dulce y no paran, porque la guitarrista Lucrecia López Sanz –además de liderar a las Beladies– acaba de poner en marcha a Lady Zeppelin, un potente combo femenino de tributo a Led Zeppelin y Fernando Blanco está enfrascado en el rodaje del clip de ‘Amanecer’, el segundo single de su álbum «Mares Lejanos», con el que le está yendo francamente bien. Para acabar de complicar su agenda está promocionando el libro «Beatlend. Los Beatles después de los Beatles», que ha escrito junto al periodista Sergio Machi y que agotó la primera edición en poco más de una semana, además de estar recogiendo muy buenas críticas; esperemos que se acabe editando en España y podamos disfrutarlo a este lado del charco. La beatlemanía se mantiene viva en Buenos Aires y por eso se puede ver a «Beatlend» en el top diez de ventas de Musimundo, la principal cadena de tiendas de discos, deuvedés y libros de la ciudad.
El puesto número uno de ese ranking es para «Peter Capusotto y sus videos. El libro», más de doscientas páginas realmente hilarantes sobre el programa del genial cómico argentino Diego Capusotto. Su show televisivo es un auténtico fenómeno social y gracias a YouTube –y tras cinco temporadas– sus personajes son imitados por chicos y grandes y se pueden ver en las camisetas de las tiendas de la peatonal y turística calle Lavalle. De hecho fue uno de los temas de conversación y risas con Xoel López, que sigue encantado con su relajada vida en la capital porteña, tiene una casa preciosa y pude disfrutar de una estupenda y animada cena con él, la fotógrafa Lola García Garrido y Seba Rubín, un músico que conocí por su banda Grand Prix y que lleva ya unos años en solitario. Xoel estaba de vuelta de su baño de multitudes en Brasil y dándole vueltas a un nuevo trabajo, el primero que editará como Xoel López, una nueva etapa en su carrera. Con una deliciosa pizza a la parrilla estuvimos recordando los días de la Elephant Band, hablando de lo divino y lo humano, de todo… Una noche fantástica que rematamos en el coqueto barrio de Palermo, con unos buenos mojitos en Mundo Bizarro, un elegante club lounge repleto de postres y cuadros con la añorada y rotunda Betty Page como protagonista. Afortunadamente pronto podremos volver a disfrutar de Xoel, que en un par de meses vendrá para ofrecer una serie de conciertos con Lovely Luna.
Desgraciadamente tuve poca fortuna en lo musical y tampoco pude asistir a ningún concierto de Súper Ratones, que han vuelto a cambiar de bajista y también estaban actuando fuera de Buenos Aires. Su manager, Lisandro Ruiz, está dándole vueltas a la tercera temporada de «Elepé», el imprescindible programa que produce para el público Canal 7 de televisión y en el que repasan exhaustivamente los álbumes clásicos del rock nacional. ¿Cuándo tendremos un programa semejante en nuestro país? El último ex bajista de la banda, Fernando “Ronnie” Astone está terminando de grabar el segundo trabajo de Contacto en Francia y con él bajo el brazo se instalará en España en marzo.
Y nada mejor que un buen asado para terminar una placentera –aunque tórrida y breve– estancia en Buenos Aires… Excelentes anfitriones, los porteños siempre que pueden te agasajan con un asado y tras haber disfrutado de ingentes cantidades de pizza y pasta era el momento de saborear una buena barbacoa casera con amigos. En el avión compartí pasaje con un exultante Carlos Sainz –que acababa de ganar el Dakar– y pude disfrutar del documental sobre el camino de Santiago que protagonizó Xoel López mientras caía en los brazos de Morfeo y me disponía a volar durante doce horas de nada.