La cantautora Mari Trini (María Trinidad Pérez de Miravete Mille) falleció ayer, 6 de abril, en el hospital Morales Meseguer de Murcia, tenía 61 años. Nacida el 12 de julio de 1947 en Caravaca de la Cruz (Murcia), fue una de las más populares cantantes españolas en los años setenta y ochenta. Autora de sus propias canciones, llegó a grabar 25 álbumes. “Cuando me acaricias”, “Yo no soy esa”, “Una estrella en mi jardín” o “Amores” son algunas de sus más afamadas composiciones.
Mari Trini quiso dedicarse desde niña a la música y la gran oportunidad le llegó a los quince años, cuando el director de cine Nicholas Ray se convirtió en su manager. Ray la llevó a Londres, donde, durante meses consecutivos trabajó en la radio, en la BBC. A los 17 años, y ya sin Ray de padrino, se trasladó a París, donde estudió canto y grabó, en francés y fuertemente influida por la chanson francesa, sus primeros singles, como «Bonne chance». En 1967 se afinca en España, y comienza a grabar para el sello RCA temas escritos por Luis Eduardo Aute, Patixi Andion o Juan Carlos Calderón, que integraron su primer álbum, Mari Trini. Sin embargo, será desde 1969 cuando su carrera dé un vuelco completo al fichar por Hispavox, donde la dejan interpretar sus propias canciones, logrando un enorme éxito con el segundo single para este sello, «Cuando me acaricias». Desde entonces, Mari Trini será un nombre popular de la música española, cuyas canciones, como «Yo no soy esa» (1972), alcanzan éxitos rotundos. Además, sus discos, producidos por Rafael Trabuchelli y arreglados por Waldo de los Ríos muestran, durante toda la primera parte de los 70 enorme calidad musical, apoyados por las siempre sensibles canciones que ella misma firma. Pero, desde finales de la década, su carrera se torna más convencional apoyada en producciones discográficas sin el brillo de antaño.
En 1979 publica el álbum A mi aire, con el que da un nuevo giro a su carrera. Durante los años 80 y 90, Mari Trini sigue grabando nuevos discos pero pensados, sobre todo, para su viejo público, que ha crecido con ella. En estos años publica discos como Una estrella en mi jardín (1982), Diario de una mujer (1984) o el doble en directo En vivo (1985). Y en 1990 da otro vuelco a su trayectoria con la publicación de Espejismos, en el que firma todas las canciones, que se adentran por géneros tan alejados de su estilo como la salsa, el rock o el blues. En 2004 le extirparon un riñón.
En la actualidad estaba preparando un disco con nuevas canciones, porque no quería ser una “vieja gloria” interpretando hasta la saciedad los mismos temas. En en 2005 publicó un doble recopilatoio y un DVD. Desde el año pasado vivía en una urbanización a las afueras de Murcia, y estaba preparando el que iba a ser el concierto de despedida de su carrera y la publicación de un libro de poemas.
