Remate, el proyecto prácticamente unipersonal del madrileño Fernando Martínez de la Serna acaba de editar Safe & sound (Mushroom Pillow), su quinto álbum. En él ha vuelto ha vuelto a tener una aportación determinante el omnipresente Paco Loco, ayudando a revalidar su prolífico y cada vez más luminoso estado de forma. Un disco de pop clásico, efectivo, vitalista e instantáneamente digerible por la audiencia potencial de EFE EME. He aquí sus reflexiones acerca del mismo. Tan lógicas como, a veces, desconcertantes. Un creador de lo más peculiar, no cabe duda.
Texto: CARLOS PÉREZ DE ZIRIZA
Foto. ANA BOLÍVAR.
¿Estás de acuerdo con quienes ven en este álbum tu obra más accesible y luminosa?
Más luminosa seguro, es más un disco para el amanecer que para la madrugada, para gafas de sol, creo. Más accesible no lo sé, pero al ser canciones menos implosivas, más pop clásico de alguna manera, puede que sean más tarareables, con más elementos que recordar. Quién sabe, para mí el público siempre es una incógnita.
¿A qué responde un título como Safe and sound?
A que caigo de pie siempre, a que aún no he perdido mi diente de oro. La vida son buenas noticias, malas noticias y noticias tibias. Safe and sound va de todas ellas pero con un final feliz.
¿En qué medida los conciertos que en los últimos tiempos has hecho con una banda rock al completo, con Paco Loco, han influido en el planteamiento del disco? Si es que es así, claro…
La verdad es que mis pálpitos sobre los conciertos no fueron en la misma línea que Safe and sound, sino paralelos. Los concibo como dos aspectos totalmente independientes que confluyen en otra tercera cosa, informe.
Supongo que a Paco Loco, dada su participación en el álbum, cabe considerarlo prácticamente como mucho más que un productor de cabecera, casi un miembro indispensable de Remate…
Totalmente, mi mano derecha, y Pepito Grillo también.
Comentas en la hoja de prensa que tenías unos 30 temas grabados, y finalmente has escogido once para el álbum y cuatro para el siguiente EP. ¿Tienes pensado hacer algo con el resto de canciones, o las consideras directamente desechables?
Hay algunas grabadas que estarán en el vinilo, otras irán viendo la luz como inéditos de algún modo, y las que no he grabado o no me convencían seguramente se quedarán por ahí, perdidas sin sentido porque seguramente no las revise, no es mi costumbre.
Te ha incomodado en algún momento que, especialmente en los albores de tu carrera (primeros discos, como Ballads dont change things) se te haya comparado con la pléyade de nuevos folk singers norteamericanos como Devendra Banhart, Vetiver o Akron/Family? ¿Lo veías justificado?
Si te comparan con buenos músicos, qué más da si hacen folk o rumba catalana. En ese sentido gracias, pienso. Sólo que hay veces en las que quizá se mire a otros espejos considerando siempre que la dirección de influencia es una y muchas veces es al contrario. Mi amigo Laszlo Kovacs, parte germinal de mi lobby desde la R de Remate, me contó una historia que se convirtió inmediatamente en nuestro particular ideario. Intentaré resumirlo: La Teoría del Mono 49 de Ken Keyes habla de una comunidad de monos de Japón que empezó a limpiar la fruta antes de consumirla. El cientifismo ilustrado razonó que cuando el descubrimiento alcanzaba al mono 49, automáticamente, en otra comunidad de monos sin relación con la pionera, se instauraba progresivamente la limpieza de la fruta antes de engullirla. Y así sucesivamente. ¿Me explico?
¿De qué se compone tu dieta musical actualmente, como aficionado a la música? ¿Hay alguna propuesta que te haya marcado especialmente en los últimos tiempos y/o que haya afectado a tu música?
Un surtido de Randy Newman, De La Soul, Ramblin Jack Elliot, The Beatles, Lou Reed, East River Pipe, Robert Pollard y Joni Mitchell.
