Nat Simons: «Es un tema que Cherie no grabó en su día con The Runaways porque, desgraciadamente, le pilló abortando en una clínica y tuvo que grabarlo Joan Jett»
“Queens of noise”, una de las canciones más emblemáticas de The Runaways, publicada originalmente en 1977, ha unido a Nat Simons y a Cherie Currie, la que fuera cantante de la banda californiana. Juntas la han revisionado y ahora luce también como el single principal del próximo trabajo de la madrileña, el disco/libro Felinas. Sara Morales habla con ellas sobre esta poderosa y sorprendente alianza.
Texto: SARA MORALES.
Fotos: ROBERSON (Foto 1), ARCHIVO ALICIA MÚSICA (Foto de Cherie Currie) y JUAN PÉREZ-FAJARDO (Foto Nat Simons).
Nunca lo habríamos imaginado y no por falta de coherencia o de puntos en común, sino por improbable, por las escasísimas oportunidades que existen de que una de nuestras artistas más potente y prometedora pueda unirse a una de las grandes figuras del rock mundial para cantar juntas una canción. Con el paso de varias generaciones entre ellas, con un océano de por medio; pero ha ocurrido. Y qué bonito y alentador que sigan sucediendo estas cosas.
Resulta que Nat Simons, inmersa todavía en la gira de su último disco, Felina, anda preparando un nuevo álbum (que incluirá un libro) en el que va a revisitar este mismo repertorio, pero en compañía de otras músicas y cantantes. Se llamará Felinas, también incluirá temas inéditos y versiones, y una de esas colaboraciones estrella es, nada más y nada menos, que Cherie Currie, la voz de las Runaways que compartía micrófono con Joan Jett, la rubia díscola y salvaje de aquella banda que, desde California, abrió las puertas del rock a las mujeres en los setenta a través de su actitud y de hits totémicos como “Cherry bomb”. «The Runaways fueron el primer grupo femenino de rock duro de la historia y Cherie Currie un referente absoluto como frontwoman para mí y para muchas mujeres. Eran totalmente provocadoras, rebeldes, “badass” y, sobre todo, muy valientes para hacer ese rock sin pelos en la lengua en mitad de aquella sociedad americana tan puritana. Fueron pioneras e inspiraron a grupos como las Bangles, las Go-Go’s y, más tarde, a las Riot Grrrl», comenta Nat Simons sobre la importancia en la historia del grupo de Cherie Currie. Y añade: «Para un proyecto como Felinas era perfecto empezar con esta colaboración, porque es toda una declaración de intenciones ».
La canción que han elegido para interpretar juntas es “Queen of noise”, otro de los clásicos de las Runaways, incluida en el segundo álbum de estudio de la banda publicado en enero de 1977 y la que le da título. «Cuando me lo propuso Nat, me hizo mucha ilusión. Además de ser bastante conocida en España, hace una música vibrante y maravillosa, y me encantó la idea de volver a hacer esta canción. Ya la había grabado con Brody Dalle, de The Distillers, para mi álbum Blvds of Splendor; pero pensé que podía ser genial grabarla de nuevo con ella también y, efectivamente, resultó así», confiesa Cherie. Cuenta Nat Simons que llegó a Cherie a través del periodista musical Ignacio Reyo, a sabiendas de que era muy difícil, casi imposible, que ella aceptara la propuesta. Él envió a la californiana el vídeo de Nat sobre la versión de “Learning to fly” y, al parecer, cayó rendida. «Enseguida me dijo que le entusiasmaba. Siempre ha sido muy cercana y amable conmigo. Ha estado involucrada en todo lo que le he sugerido, como el show compartido del Azkena que también le propuse hacer. Y, si te digo la verdad, aún no me creo todo esto y que vaya a venir por primera vez a España ‘‘por mi culpa’’», matiza Nat.
Cherie Currie: «Veo a Nat como me veía a mí misma en The Runaways: tratando de marcar la diferencia. Lo está haciendo muy bien y con amabilidad»
Así es, el 17 de junio van a subir juntas al escenario de la nueva edición del festival Azkena Rock, del mismo modo que hoy, 14 de junio, tocan en Madrid, para prender la mecha de ese poderío rock femme que comparten, porque los lazos que las unen trascienden a la distancia, al tiempo y a la edad que las separa. «Veo a Nat como me veía a mí misma en The Runaways: tratando de marcar la diferencia. Y creo que Nat lo está haciendo muy bien y con amabilidad. En The Runaways teníamos que ser realmente duras, siempre cabreadas. Estábamos en un negocio dominado por hombres, algo que, en este preciso momento, todavía sigue siendo así; aunque es cierto que ahora hay muchas más mujeres en la música. Gracias a Dios, el panorama es tan diferente de cuando yo estaba creciendo…», confiesa Cherie Currie.
Una canción con historia y final feliz
La propia Nat Simons describe muy acertadamente el papel fundamental que las Runaways han desempeñado en la música y el de cada una de las integrantes que dieron vida a la leyenda: « La puesta en escena de Cherie, para tener 16 años, era algo de otro mundo; como el carisma y la visión punk de Joan Jett, casi adelantada a su época y fijándose en otra pionera como era Suzi Quatro. También la pasión hard rock de Lita Ford, que tenía esa fuerza, esa destreza, con aquellos solos de guitarra tan punzantes; y Sandy West, la batería, que fue el motor para formar el grupo y era la que lo mantenía unido, pese a malos rollos que había entre varias de ellas. Cherie, Joan y Sandy eran una piña, pero todas ellas juntas eran fascinantes, y era sorprendente ver a chicas adolescentes con ese magnetismo hacerlo tan bien; no me extraña que inspiraran y sigan inspirando a tantos grupos de chicas o incluso a solistas. ¡Son icónicas!».
Cherie, por su parte, sabedora de la importancia de su legendaria banda, sigue mostrándose satisfecha de haber pertenecido a ella y de que, de la mano de sus compañeras, consiguieran sembrar un precedente de oro en el rock mundial: «Creo que las cinco miembros originales hicimos grandes cosas. Aunque no duramos mucho, dejamos huella y estoy muy orgullosa; siempre lo estaré. Por eso, insisto en hacer aquellas canciones en vivo, porque traen un gran sentimiento de orgullo y al público le encanta. A la gente le encanta la música de The Runaways y a mí me encanta ser quien puede cantar esas canciones».
En el caso de la unión de Nat Simons y Cherie Currie, como decíamos, el pretexto, el escenario, es la canción “Queens of noise”. Un tema que Cherie no pudo grabar en su día en el estudio junto al resto de las Runaways, por encontrarse, en aquel preciso momento, en una clínica abortando. «Estaba en el hospital cuando Joan grabó la voz principal de “Queens of Noise” que, por cierto, fue Billy Bizeau quien la escribió para mí. Y fue doloroso cuando llegué al estudio y vi que ya estaba terminada, pero, como tenía muchas ganas de tocarla en vivo, Joan y yo nos dividimos la canción para tocarla en directo. Han pasado décadas y décadas de aquello, cuarenta y siete años desde que se lanzó el primer disco de Runaways, y cuarenta y seis años desde que se lanzó “Queens of Noise”. El tiempo ayuda a superar las cosas».
Esta misma circunstancia es la que ha llevado a Nat a elegir este tema, entre todos los que conforman el incandescente repertorio de las californianas: «En un principio pensé que era buena idea porque es una canción que Cherie no pudo grabar en su día y tuvo que grabarla Joan Jett. Pero, además, creo que es un tema que, por lo que relata, encaja totalmente con el concepto del disco Felinas».
Nat Simons: «The Runaways fueron el primer grupo femenino de rock duro de la historia y Cherie Currie un referente absoluto como frontwoman para mí»
Mano a mano y con una complicidad intachable, a pesar de los miles de kilómetros de separación, han logrado levantar la nueva versión de “Queens of Noise”. Una revisión más rockera todavía, potente, glam y actual al mismo tiempo, en la que también Igor Paskual ha puesto su granito de arena y de cuyo proceso de grabación nos habla la propia Nat: «Ella en Los Ángeles grabando sus voces con su hijo Robert Hays, que es un gran productor. Por otro lado, Igor Paskual produjo y grabó la parte instrumental en Asturias y yo grabé mis voces en el estudio de José María Rosillo, en Madrid, donde mi hermana Elena y Anchel Solana metieron voces y guitarra adicional, respectivamente. Nosotros le mandamos todo lo instrumental con mi voz de referencia y ella hizo un trabajo increíble, y así ya, con su voz, estaba todo redondo. Es una mujer que entiende tan bien el estilo… Lo lleva dentro… Yo siempre fui con mucho cuidado con todo para que le gustara, con respeto a la canción y pensando que ella estuviera contenta con el resultado. Nuestra versión le ha gustado mucho y, por eso, la interpreta con fuerza y garra como ella sabe. Todavía recuerdo lo que dijo cuando escuchó mi interpretación vocal del tema: “You killed it Nat!!”».
Un presente muy vivo
Felinas, el álbum que anda preparando Nat Simons y del que ya hemos podido escuchar esta imponente revisión de “Queens of noise”, su single principal, verá la luz a través de un crowdfunding que arrancará el 20 de junio desde este enlace: https://vkm.is/felinas. En él podremos escuchar a Simons junto a otras artistas como Anni B Sweet, Vega, Aurora Beltrán, Rebeca Jiménez, Miss Raisa o Eva Ryjlen y, además, vendrá acompañado de un libro en el que la propia Nat narrará varias historias que se entremezclan con las voces de mujeres de la música como Lucinda Williams, Nicole Atkins, Virginia Maestro, Margo Price, Rihannon Giddens… y una larga lista por delante.
Queda para el recuerdo y la posteridad, en un apetecible ejercicio de nostalgia, este inesperado rescate del legado de las Runaways. Una experiencia de la que Nat Simons asegura: «He aprendido mucho. Ver cómo se mueve Cherie en un escenario es algo que a mí me ha servido a la hora de soltar mi guitarra. Al trabajar con ella también me ha dado una lección y es que, por muchos años que hayan pasado, sigue siendo la misma y mantiene esa energía e ilusión».
Desde el otro lado, Cherie Currie anuncia la llegada de un nuevo disco, Bldvs of Splendor (Ingram Music), que, aunque fue grabado en 2010, quedó archivado durante una década por el sello Blackheart Records y ahora, por fin, va a ver la luz como merece. Y concluye asegurando: «Nat es un ser humano maravilloso. He visto a mucha gente en este negocio que obtiene cualquier tipo de éxito o celebridad y, de repente, se convierte en una persona diferente. Pero Nat no es una de esas personas. Ella es alguien que aprecia todo lo que se le presenta. Está agradecida por su gran talento y es increíblemente generosa, algo destacable dentro de este negocio donde siempre prevalece el egoísmo. Así que ella y yo tenemos eso en común. Nat quiere incluir a las personas, no excluirlas. Es genial trabajar con ella».