Mi sueño es el disco de boleros que grabó antes de morir el cantante cubano Ibrahim Ferrer (1927-2005) que aparecerá en marzo. Tras el éxito del disco Buenavista Social Club, en 1997, al año siguiente formó parte de los conciertos del grupo en Holanda y Nueva York que fueron inmortalizados por Win Wenders en el documental del mismo nombre y que también recogía momentos de la grabación de su primer disco en solitario. Su segundo álbum, Buenos hermanos (2003), ganó el Grammy Latino pero los Estados Unidos le negaron el visado que le impidió recoger el galardón.
En 2004 decidió acometer el proyecto que siempre había soñado, un disco íntegramente dedicado al bolero. Las primeras sesiones se realizaron en los viejos estudios Egrem de la Habana con el pianista Roberto Fonseca y los habituales del BSC, el contrabajista Cachaíto López y el guitarrista Manuel Galbán. Las sesiones de grabación continuaron en 2005 con un repertorio que tuvo la posibilidad de montar en directo en la gira europea titulada Mi sueño, a bolero songbook tour; a su regreso a la Habana, el cantante cubano fue hospitalizado y falleció el 6 de agosto.
Nacido en Santiago de Cuba, allí se dio a conocer a mediados de los años cincuenta con la orquesta de Chepin-Choven, se fue a la Habana en 1957 y se integró con la orquesta Los Bocucos de Pacho Alonso. Retirado de la música en 1991, estaba limpiando zapatos cuando Juan de Marcos González le llamó para las primeras grabaciones de Buena Vista Social Club y Afro Cuban All Stars. «Me dijeron que no servía (para cantar) siempre le estaré agradecido a Ry Cooder la oportunidad», explicaba en su casa el día en que la película de Wenders se estrenó en la Habana. Un hombre humilde y cumplidor: ese día tenía un montón de entrevistas con la prensa internacional desplazada al evento pero al enterarse de que el periodista se iba a pasar por un ensayo del grupo Afro-Cuban Alll Stars aprovechó para disculparse por no poder ir. Cuando el «mandado» llegó al director del grupo Juan de Marcos González, éste sabía de sobra que no podía acudir.
Mi sueño cuenta con emocionantes boleros de la talla de «Si te contara» (que en España ha sido popularizado por Martirio), «Melodía del río», «Cada noche un amor» y clásicos como «Perfidia», «Quiéreme mucho» o «Quizás quizás» (con Omara Portuondo, con la que protagonizó una de las secuencias más hermosas de la película de Wenders). Ibrahím Ferrer pudo cumplir su sueño, su disco de boleros, algo que Celia Cruz no pudo conseguir.
