DISCOS
«Encuentro un defecto que hace que el álbum se me haga denso, lento… y aburrido»
Ben Harper
Winter is for lovers
ANTI-PIAS, 2021
Texto: EDUARDO IZQUIERDO.
Pues yo no compro, ¿qué quieren que les diga? Me he pasado las últimas semanas leyendo críticas positivas, algunas directamente deslumbrantes sobre el último trabajo de Ben Harper, publicado a finales del año pasado. Dice mi buen amigo Mario Cobo que «todo guitarrista ha de hacer un disco instrumental», y parece que Harper se lo ha tomado al pie de la letra. El tema es que echo en falta demasiado su faceta como vocalista y sus letras, y ahí la cosa me flojea. No seré yo quien ponga en duda que el disco es bonito. Sí. Como tantos otros. Pero leer cosas como que el equilibrio está en «su quietud y su pausa» (Ruta 66) o que «el arco narrativo de la música es estático, por lo tanto, todas las canciones comparten una esencia y misma aura, en la que evocan un sentimiento de calma y tranquilidad» (Velv Magazine) a mí me hace fruncir el ceño, y más cuando compruebo que tienen toda la razón.
Pero allí donde esos respetables críticos, probablemente mucho más que yo, ven un mérito, yo encuentro un defecto. Un defecto que hace que el álbum se me haga denso, lento… y aburrido. Lo siento por Ben, al que admiro profundamente, pero quizá esta es la primera vez que uno de sus discos me transmite esa sensación. Y probablemente esté equivocado, porque no he sido capaz de encontrar crítica mala a los diez temas de Winter is for lovers. Por algo será. Pero yo les digo lo que siento, y aunque en piezas como “Inland Empire” o “London” pueda encontrar un resquicio de interés, es demasiado poco. Vale, Mario, Ben ya ha hecho su disco de guitarrista asegurando que esperaba que su amor por la guitarra flamenca, clásica, hawaiana y de blues debía verse reflejado en él. Por mí, ya puede volver a lo de antes.
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Anterior crítica de discos: We will always love you, de The Avalanches.
