“Le regalé a Nico la discografía completa de Dr. Feelgood y le dije que ahí estaba todo lo que tenía que saber para hacer este disco”
Acaba de ver la luz el primer trabajo puramente solista de José Antonio García, “Lluvia de piedras”. Un nuevo camino para una de las voces más importantes del rock granadino. Juanjo Ordás habla con él.
Texto: JUANJO ORDÁS.
Fotos: JAVIER ROSA.
No es la primera vez que José Antonio García graba fuera de 091. La legendaria voz del vocalista de los no menos legendarios granadinos se ha embarcado anteriormente en diferentes aventuras musicales, pero esta es la primera vez que firma un álbum con su propio nombre. El epé “Cuatro tiros por cabeza” cruzó su camino con el de El Hombre Garabato, una de las bandas más interesantes de la actual escena española, y ahora, con ellos como apoyo fundamental, José Antonio edita “Lluvia de piedras” (Warner), un disco muy a tener en cuenta. Auténtico, feroz y emocionante.
Has grabado “Lluvia de piedras” con El Hombre Garabato como banda, y dos de sus miembros, Nico Hernández y Óscar Gallardo, han preparado gran parte de las canciones. Anteriormente ya habíais sacado un disco compartido. ¿Cómo os conocisteis?
En alguna ocasión ellos se habían acercado a invitarme a algún concierto. Fui a la presentación de su disco “El héroe más cobarde” a Planta Baja, en gran parte porque a Ana, mi mujer, le gustaban mucho. Esa noche estuvimos de bar en bar hablando de música y al final de la noche determinamos grabar un video acústico con su canción ‘Otra vez’, que me gustaba especialmente. Semanas más tarde lo grabamos en una tienda de discos de Granada. La conexión fue muy grande desde el principio y les planteé la posibilidad de hacer un disco compartido. A partir de ahí, todo fue rodado y ahora son un puntal fundamental para mí.
El Hombre Garabato tiene un estilo musical muy distinto al del netamente rockero “Lluvia de piedras”, ¿quién dio las directrices: se adaptaron ellos a ti de forma natural o se lo pediste tú?
Ha costado trabajo llevarlos a mi terreno porque su estilo es diferente a lo que hemos hecho en este disco. A ellos le impone este repertorio, pero eso hace que trabajen con muchas más ganas y que tengan un cierto aire salvaje, como los grupos en los orígenes del rock o del punk. Me ha costado trabajo llevarlos por la senda, pero lo he conseguido. También hay que decir que tenemos muchos gustos en común. Hemos coincidido en gustos como Mando Diao, Black Keys, The Strokes, The Hives o Dirty Pretty Thing. Ellos me han aportado visiones nuevas y yo me los he llevado a las raíces. Le regalé a Nico la discografía completa de Dr. Feelgood y le dije que ahí estaba todo lo que tenía que saber para hacer este disco. Son listos y lo pillaron rápido.
¿Cómo describirías tu relación con Nico Hernández y Óscar Gallardo? Son grandes tipos con muchísimo talento.
Tanto ellos como el resto de El Hombre Garabato han sido un regalo para mí estos últimos años. Tienen mucho talento. En otras condiciones más favorables estoy seguro que tendrían un reconocimiento en todo el país que no está teniendo ahora, pero que espero y deseo que tengan. Desde el principio nuestra relación fue más allá de lo musical y ahora los considero de mi familia.
El disco empieza con ‘Lo llaman suerte’, un rock sin concesiones y raíces de los 50. ¿Querías indicar desde el principio que esto iba a ser un disco de rock con mayúsculas?
Así es. Había que empezar con un tema como este, potente, que siente las bases de lo que hay en el resto del disco. Desde mi punto de vista tiene todo lo que quería para abrir un disco: una letra que es una declaración de intenciones, un buen riff de guitarra y una armónica pantanosa. Quería entrar por la puerta grande a los oídos de quien escuche el disco.
‘Todo puede ser peor’ sigue ahí, dando duro. Y es bastante irónica en su letra.
Sí, se trata de una canción garaje con un tempo alto. Me siento muy cómodo en los temas rápidos, al final mis comienzos en TNT me han marcado mucho en mi carrera posterior y este tipo de canciones me gustan especialmente. El texto, como dices, es muy irónico, es una especie de parodia del mundo actual, de la sociedad borrega en la que vivimos donde los partidos de fútbol y la televisión hacen que la gente grite sin darse cuenta de los verdaderos problemas. Un asunto muy punk, como ves.
Escuchando el disco queda claro que, aunque hay matices y guiños a géneros, suena muy, pero que muy actual. Y muy personal.
He intentado recoger todas mis influencias desde que comencé hasta hoy, y he intentado que resulte coherente. Lo antiguo es actual y si bebes de las fuentes clásicas, de Beatles, Feelgood, Clash, siempre vas sobre seguro. La producción de Pablo Sánchez también ha sido determinante a la hora de conseguir ese sonido.
La producción de Pablo es estupenda. ¿Por qué le escogiste a él?
Ya habíamos trabajado hace años, pero fue en “Cuatro tiros por cabeza” donde me reencontré con Pablo. El trabajo fue magnífico y la implicación total. Más adelante fue el encargado de grabar el concierto de 091 en la Plaza de Toros de Granada. Pablo es una persona excepcional y cuando se mete en un proyecto se desvive, le echa horas y horas de manera casi obsesiva y normalmente hay que ponerle un tope de tiempo porque si no sigue y sigue buscando la perfección. Trabajar con él es una apuesta segura.
“Intenta reflejar el momento en el que estoy ahora, esperanzado con el futuro, con ganas de seguir en el camino con el viento a mi favor”
‘Se puede ver el final’ es una canción que sube mucho las pulsaciones, hay cierto espíritu punk ahí, ¿verdad?
Cierto, está muy en la línea de ‘Todo puede ser peor’, muy ácida, muy rápida, muy punk. El mundo se derrumba y me pregunto si vamos a limitarnos a seguir mirando. En este disco no simplemente he recopilado temas que tenía de antes, también he hablado mucho con los autores de las letras para intentar reflejar lo que yo buscaba. Nos hemos sentado muchas horas y hemos hablado de todo un poco. Muchas de las canciones de este disco surgen de estas conversaciones. Esta es una de ellas. El punto post punk de este tema me gusta especialmente.
O sea que estás siempre presente, desde la concepción del tema hasta su grabación y mezcla. Dejémoslo claro: no te hacen el disco, sino que el disco lo haces tú con tus colaboradores de confianza.
Eso lo tenía claro desde el principio, no quería que fuera un conjunto de canciones sin relación, sino tomar parte en las composiciones, sugiriendo, aportando ideas. Quería que el disco contara cosas de mí, de lo que me preocupa o me gusta y que musicalmente estuviera dentro de mis gustos y preferencias, de modo que para eso era importante estar en todo el proceso.
En ‘Ángel de mis demonios’ compones junto a Tony Guerrero, con el que en su día pusiste en marcha Guerrero García, ¿cómo fue volver a trabajar juntos?
Realmente nunca hemos dejado de trabajar juntos, es un buen amigo y es muy bueno haciendo melodías. Sigo contando con él con frecuencia.
Tú firmas la letra de esa canción, algo que no sueles hacer, y resulta que es bastante buena. ¿Cómo es que no te prodigas más?
En Guerrero García hacía gran parte de las letras y es algo que, aunque cuesta a veces, me motiva mucho y en el futuro me gustaría seguir trabajando. Intento expresar lo que me sucede o me ocurre en forma de letra sobre melodías que me pasa Tony o alguno de mis colaboradores.
Haces una versión de Conservantes Adulterados, la potentísima ‘Situación límite’. Supongo que querías rendir un homenaje a los que ya no están.
Es algo que tenía pendiente. Fue un grupo auténtico, genuino y muy desconocido. Éramos muy amigos en los ochenta, y tenían grandes canciones. Por desgracia murieron muy jóvenes y me apetecía mucho cantar una de sus canciones más interesantes. Es una canción sencilla pero con mucho sentimiento y energía, y en esta versión yo he intentado dar mi particular visión de ella. Quería hacer alguna versión en este disco, desde el principio esta fue una opción. También barajé hacer canciones de Jesús Arias, pero he preferido dejarlo para más adelante, tomar distancia un tiempo.
‘Cuando ya no esté’ nos remite de nuevo a los 50, es una hermosa balada clásica que podría haber cantado un rocker estadounidense.
Esa era la idea. Es una canción conmovedora, a veces duele cantarla y puse todo mi corazón en cantarla bien. Ya me había acercado a este género en temas como ‘Corazón malherido’ con 091 y me encanta volver a hacerlo, es un tipo de canción que me gusta interpretar. La letra es emocionante y me toca mucho por dentro.
El solo lo hace Víctor Lapido y es hermosísimo.
Víctor es un guitarrista muy completo y muy original. He trabajado con él en 091 durante muchos años, como sabes, pero también estuvo conmigo un tiempo en TNT y metió guitarras en “Cuatro tiros por cabeza”. Es un buen amigo y un gran músico. En este tema en concreto, la tristeza y la emotividad de la canción la traduce a ese solo tan sentido.
‘Di que sí’ es adrenalina pura. Toca despertarse a gritos después de la balada, ¿verdad?
Queríamos que fuera un petardazo, una canción que te anime a coger la moto y a tu chica y salir a buscar emociones. Me recuerda a las pelis americanas que pasan todo el tiempo en la carretera buscando pelea o lo que sea. “Me voy ahora mismo, ¿vienes o no? Di que sí o calla”. Esto tan simple es lo que queremos transmitir.
Sí, esos destellos de espontaneidad tan necesarios para no caer en la desidia.
Esos destellos de espontaneidad hacen la vida más interesante. Es espontánea y directa.
Además, ‘Di que sí’ es un tema con más dobleces de lo que parece. Según avanza se hace más oscuro e incisivo, deja de ser lo que parecía al principio.
Llevas razón, a medida que avanza hay un giro, quizá percibo ciertos tintes sexuales en ese final con coros. La pareja, la pasión, el deseo sexual tienen un espacio también en este disco.
‘El viento sopla a mi favor’ es un clásico instantáneo. Y fue el primer single. Es una tarjeta de presentación estupenda.
Es una canción que lo tiene todo. Un buen riff, una letra con fuerza y un buen estribillo. Tiene un aire años 60 que me gusta mucho y desde el principio vi que sería una buena opción ponerla de single.
En la letra de ‘El viento sopla a mi favor’ hay una búsqueda de equilibrio entre la nostalgia y la esperanza.
La letra es muy positiva, intenta reflejar el momento en el que estoy ahora, esperanzado con el futuro, con ganas de seguir en el camino con el viento a mi favor. Aunque como bien dices, tiene una cierta nostalgia del pasado, o por lo menos una mirada atrás para ver quién he sido y cómo he llegado a lo que ahora soy.
Me parece que tiene un componente trascendental. El día que ya no estés, ¡y que ese día tarde en llegar!, las generaciones más jóvenes podrán encontrarte en las canciones. Incluso tu descendencia.
Cierto, me gustaría que mis hijos en el futuro oyeran estas canciones y les sirvieran para su vida, para seguir adelante. Me gustaría que sintieran que su padre quiso ser una persona auténtica y que se dejó el pellejo en lo que creía. Las canciones pueden hacerte sentir estas cosas.
Tanto en el caso de Lapido en 091, como de El Hombre Garabato en este disco, cantas mayormente letras que no están escritas por ti pero, como siempre, las interiorizas y las devuelves al oyente con convicción, las haces tuyas. ¿Cómo es ese proceso?
En el caso de 091 era muy diferente, porque las letras llegaban al estudio unas horas antes de grabar y lo que hacía era intentar dar todo mi sentimiento con lo que en ese momento sentía. Recuerdo que la letra de ‘Que fue del siglo XX’ llegó estando en el estudio y al verla flipé. Con 091 era así. En este disco las letras las he pensado más con los autores o las mías propias, hemos cambiado cosas con las que no me sentía identificado, he sugerido ideas para que escribieran sobre ellas y, en todo momento, he querido que las letras expresen mi situación actual y que hablan de lo que me pasa por dentro.
En ‘Fuego’, como en otros momentos del disco, se da una mezcla entre el rock de los 50, 60 y 70, creándose una amalgama muy interesante. Porque en una sola canción puede haber detalles de todas las épocas.
Aunque empieza con un riff muy clásico, en el estribillo hay ecos sesenteros. En este disco he querido incluir todas mis influencias, desde el punk al garaje o el pop. Todos esos estilos y muchos otros forman parte de mi historia personal y me siento cómodo cantándolos. En mi primer largo en solitario quería dar una buena muestra de lo que me gusta, de lo que me emociona cantar.
Si tuvieras que citar los tres discos ajenos que más te han influido como artista, ¿cuáles serían?
Permíteme que te ponga cuatro, son mis cuatro discos de referencia en mi vida. “Stupidity” de Dr. Feelgood , “Never mind the bollocks, here’s the Sex Pistols”, de Sex Pistols, “Stray Cats” de Stray Cats y el álbum blanco The Beatles [“The Beatles (the white album)]”.
‘Tiempo perdido’ cierra el disco. Es una canción en la que firmas letra y música. Sin duda, es una canción especial.
Es especial para mí porque no suelo escribir músicas, pero en esta me he lanzado a la piscina yo solo, y estoy contento con el resultado, lo cual me anima a seguir escribiendo canciones, alternando con cantar composiciones de otros.
¿Sientes este disco como un reinicio?
Definitivamente lo es. Es verdad que mi voz siempre va a estar vinculada a 091, pero hay vida después de los Cero, y yo siento que tengo muchos más registros que quiero explotar en esta carrera en solitario. España es un país difícil a veces, la gente quiere que vuelvas sobre lo que ya conocen, y yo quiero seguir avanzando, descubriendo nuevos estilos, matices nuevos en mi voz. Espero que la gente abra los oídos y le dé una oportunidad a este trabajo.
¿Cómo estáis planteando el repertorio de la gira presentación? Imagino que la base será este “Lluvia de piedras”. Sería una pena que no sonara todo el disco en vivo, porque seguro que funciona muy bien ante el público.
Sí, queremos hacerlos todos, al menos en las salas, en los festivales tendremos que reducir el repertorio. Ya estamos ensayando mucho para que suene potente en directo. Arrancaremos la gira en octubre y espero que tengamos la ocasión de llevarlo a muchos sitios, siento que es un buen trabajo y quiero que llegue a la gente y lo defendamos cara a cara.
