Hace 43 años, el gobierno israelí prohibió a los Beatles actuar en Israel por miedo a que el grupo «corrompiera a la juventud local». Un disparate más de los muchos practicados por gobiernos de todo color para salvaguardar la moral colectiva. Pero hoy, la ministra israelí de Exteriores, entregará a la hermana de John Lennon, Julia Baird, una carta pidiendo disculpas por lo que consideran un «error histórico». Además, van a invitar a McCartney y a Starr a actuar en Jerusalén con motivo del 60 aniversario de la fundación del estado de Israel.
