«Joan Miquel Oliver es un orfebre, digámoslo claro. Consigue con materiales populares llevar a sus canciones a las más altas cotas de belleza»
Antònia Font
«Lamparetes»
ROBOT INNOCENT
Texto: CÉSAR PRIETO.
Había expectación por ver en qué paraba el nuevo disco de Antònia Font, en primer lugar por el lustro que llevaban sin canciones nuevas en estudio y en segundo lugar por ver por donde tiraba Joan Miquel Oliver tras el «Bombón Mallorquín» que tan buen sabor de boca había dejado. Y la resolución de esta espera ha sido positiva, muy positiva. Quizás «Lamparetes» no sea un disco tan inmediato como los habituales en el grupo, ni tan vanguardista como el de su líder en solitario. Quizás cueste de entrar y se crezca a base de escuchas, pero cuando te has abierto a él ya estás irremediablemente hechizado.
Joan Miquel Oliver es un orfebre, digámoslo claro. Consigue con materiales populares llevar a sus canciones a las más altas cotas de belleza. Déjenme que aluda a una y después seguimos con el disco y sus conceptos. ‘Es far de Ses Salines’ la han llamado y hace caer una fina lluvia sobre los sentimientos. Un pequeño cuento triste sobre la nostalgia y la vejez, modulado por el narrador con una voz impersonal que resulta, por tanto, más estremecedora. Casi se puede sentir el frío.
Porque es un disco frío y sombrío, excepto en sus dos extremos: ‘Me sobren paraules’ con una de sus retahílas clásicas de amor por el lenguaje, y ‘Sospitosos’, a ritmo de tarantella. En lo demás, y a medida que va avanzando, va tornándose crudo. Cinematográfico también. Tras Clint Eastwood, un recitado a la manera de Sisa, aparece ‘Icebers i guèisers’, en que las palabras se ajustan perfectamente al sentimiento, a la soledad, a la destrucción. También sombría y con aliento épico –casi operístico- es ‘Pioners’, y polvorienta ‘Carreteres que no van enlloc’.
Y dejo, para cerrar, la otra cara de esta tormentosa melancolía. El grupo deriva a mínimas historias, y en este caso es tierna y cursi, una pareja de patinaje artístico que se casan en la pantalla tras vencer en las olimpiadas de Canada. La descripción del ejercicio deportivo debería ser modelo de como se construye una letra para una canción pop sobre lo irrelevante sin concesiones, con tensión.
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Anterior entrega del disco del día: “Minimúsica: Els Transports”.