Podrían ser veinticinco, o treinta discos, pero el límite lo ponemos en veinte. Veinte discos comprimiendo un año da una buena medida y sirve para cribar mejor, aunque nos pese dejar fuera algunas obras ampliamente disfrutables. Como siempre, hay variedad de estilos e intentamos obviar los lugares comunes, primando originalidad y emoción. En una clara apuesta por el rock, Coque Malla y su «La hora de los gigantes» se hace con el primer puesto.
Coque Malla
«La hora de los gigantes»
WARNER
El ex Ronaldo se muestra en su tercer disco como un rockero adulto, dominando referencias que son filtradas en un sonido personal y directo, en el que cabe el rock, el pop, la música tradicional y el soul. Hasta los ecos dylanianos de ‘Hasta el final’ tienen personalidad propia y son capaces de subyugar por su naturalidad. En todo caso, «La hora de los gigantes» no merece ser troceado y lo mejor es degustarlo en su integridad e intensidad, disfrutando de sus soberbias canciones, de la cálida producción ideada por el propio Coque Malla y Mauro Mietta, de su sonido próximo y sincero, de las meritorias interpretaciones instrumentales y de la inmejorable voz de su autor. Coque Malla es, por derecho, uno de los grandes clásicos del rock español.
–
Fabián
«Adiós Tormenta»
VICIOUS RECORDS
Con este segundo trabajo, el cantautor leonés se desmarca de todos los primos lejanos de Quique González que invaden el actual panorama a base de ingenio, excelentes temas y un espíritu ibérico que llega cargado de melancolía. Pura artesanía sonora.
–
Javier Corcobado
«A nadie»
PIAS
Grabado en México, «A nadie» es un disco tan denso como enorme, plagado de temas que recogen influencias tanto de ritmos latinoamericanos como del rock más entregado y distorsionado. Y, claro, están las fértiles palabras en versos intensos, de terciopelo y fuego.
–
Alis
«Cuando el sol nos dé calambre»
HOOK/EMI
Álbum dividido en dos partes, acústica y eléctrica, para facturar puro pop de la mejor escuela, con resonancias británicas pero de clara esencia española. Con actitud, sensibilidad y buen gusto, Pachi Alis entrega una colección de canciones mayúsculas.
–
La Bien Querida
«Romancero»
ELEFANT
El mejor debut del año es el de Ana Fernández-Villaverde, heredera de la mejor tradición pop femenina española, pero sabiéndose en pleno siglo XXI y sin renunciar a otear el espacio exterior. Pop tan preciosista como precioso y atemporal. Un disco y una creadora absolutamente fascinantes.
–
Lovely Luna
«Chang y Eng»
ESPUTNIK/GOIDEL
Cuando el folk de raíz estadounidense invade la escena nacional hasta el hastío, Lovely Luna demuestran que se puede ser natural y campestre solo con buenas canciones, mejores intenciones y con mucha música pegada a las orejas. Aquí no sobra nada.
–
Pablo Moro
«Pequeños placeres domésticos»
BOOMERANG DISCOS
¡Algo de buen rock de autor en un año bien escaso de éste! Sí, Pablo Moro pisa el acelerador, cuenta excelentes historias y escribe grandes canciones, quizás no ande sobrado de carisma, pero sí demuestra enorme talento para poner en pie sus temas.
–
Tórtel
«Lugar nuevo»
LOS ENANOS GIGANTES
Otro disco de folk acústico con personalidad propia, fruto de la unión de Joaquín Pascual (Surfin’ Bichos, Mercromina, Travolta) y Jorge Pérez (Ciudadano, Maderita), quienes se han destapado con un hechizante ramillete de canciones sencillas pero mágicas.
–
Barricada
«La tierra está sorda»
WARNER
Los veteranos Barricada entregan una obra conceptual y combativa alrededor de la recuperación de la memoria histórica y la Guerra Civil. Un grupo que toma partido y que parece vivir una interesantísima refundación artística que le insufla nuevo aliento vital.
–
Lagartija Nick
«Larga duración»
EVERLASTING
Los granadinos, una banda ya clásica, ofrecen un catálogo de piezas despojadas de ornamentación, que no quieren saber nada de todo lo que resulte opulento e innecesario. Van al tuétano de la canción. Un trabajo urgente, inmediato.
–
Remigi Palmero
«Sense comentaris»
LA CASA CALBA/K INDUSTRIA
El regreso de Remigi Palmero, tras quince años de silencio discográfico, nos devuelve al genio valenciano acompañado únicamente de su guitarra eléctrica. Sobriedad y austeridad, sí, pero también una inmensa capacidad para emocionar con lo mínimo.
–
Niño Josele
«Española»
DRO/WARNER
El actual maestro de las seis cuerdas flamencas se mueve con soltura en una obra que traspasa las fronteras del género y se interna en el jazz con total naturalidad y solvencia. Un disco epidérmico y brioso. Aquí está la fórmula de la grandeza de la música libre.
–
Quique González
«Daiquiri blues»
LAST TOUR/SONY
El hermano mayor de toda una generación, baja intensidad con la ayuda de Brad Jones y un equipo de lujo. Frente a la gran panorámica, aquí domina el matiz, las carreteras secundarias se imponen a las autopistas, los medios tiempos al rock. González sigue haciendo lo que cree conveniente. A su aire.
–
Peret
«De los cobardes nunca se ha escrito nada»
UNIVERSAL
El padre de la rumba catalana, a los 74 años, desvela influencias recuperando canciones ajenas que le marcaron en la infancia y juventud. Todo cuidado al máximo y al servicio de una voz monumental que es patrimonio de la mejor música popular española. El DVD que lo acompaña es un festín.
–
Cooper
«Aeropuerto»
ELEFANT
Álex Díez, que sólo graba EPs, recopila un segundo volumen de éstos. Una fórmula que le permite sonar fresco y firmar un álbum vigoroso y sin desperdicio, en el que no sobra nada. Pop de pata negra.
–
Ángel Petisme
«Río Ebrio»
TRANVÍA VERDE/FUNDACIÓN AUTOR
El poeta y cantautor mira hacia la geografía de la infancia, a los pasajes de la memoria mientras, por contraste, nos muestra el mundo de hoy a ritmo de pop-rock elegante. Su voz personal y sus canciones de mano maestra son un lujo imprescindible.
–
Juan Rivas
«Superdiscotropical»
AUTOEDICIÓN
Este quinto disco del vigués (que no ha conocido edición física, se regala desde su Myspace) es un sabroso homenaje a la bossa nova, al jazz y al easy listening, estilos que Rivas mezcla con éxito con sonidos más actuales como el house y el drum ‘n’ bass. Es una fiesta, pero con mucha cabeza.
–
Mamá
«La mejor canción»
ROCK INDIANA
Con poco ruido, los grandes Mamá regresaron con disco nuevo, ni forzado ni impuesto, sonando a ellos mismos pero treinta años después. O lo que es lo mismo, entregando una obra excepcional, sin lugar para la nostalgia. Están vivos y el mundo debería festejarlo.
–
Kikí d’Akí
«No mires atrás»
SIESTA/NUEVOS MEDIOS
Tercera entrega desde el regreso de María José Serrano y resulta otra conmovedora obra de pop atemporal. Con fina producción de Parade, estas canciones miran al paso del tiempo con una distinción que arrebata a cualquier con un mínimo de buen gusto.
–
Fundación Tony Manero
«Pandilleros»
MUSIC BUS/WARNER
El grupo barcelonés se marca la banda sonora de una película inexistente, ambientada en los años 70. Funk y sonido Fania a rabiar en un trabajo ingenioso y sorprendente que necesita del libreto para ser plenamente comprendido. El proyecto más original del año.
–
Aquí está el listado de los mejores discos internacionales de 2009.
Aquí está la lista de los mejores recopilatorios, box sets, reediciones y libros de 2009.
–
Para consultar los mejores discos españoles de 2008, puedes acceder desde aquí.
